Más de 10.000 personas dependientes han perdido la ayuda económica que recibían para ser cuidados por su familia en su entorno más cercano desde que María Dolores Cospedal y el PP gobiernan en Castilla-La Mancha.
Así, se desprende de los datos públicados relativos a la Ley de Dependencia correspondientes al mes de marzo y que serán los últimos que se publiquen en esta legislatura que acaba el 24 de mayo con las elecciones autonómicas y municipales.
Si en mayo de 2011, último mes del anterior Gobierno regional socialista había 27.600 prestaciones económicas concedidas, en marzo de 2015 esa cifra se había reducido a 17.497, es decir, 10.103 menos.
Estas ayudas, que el consejero de Sanidad y Asuntos Sociales, José Ignacio Echániz, descalifica como "nominillas", por cierto, reducida su escasa cuantía un 15% por el Partido Popular desde que accedió al Gobierno, permitía a la persona dependiente estar en su domicilio cuidado por sus familiares más cercanos, mayoritariamente mujeres.
Así, 7 dependientes han perdido su prestación económica cada día que ha gobernado Cospedal Castilla-La Mancha, incluido domingos y festivos.
Una reducción muy vinculada también a la caída en el número de beneficiarios con grado III (la dependencia más severa) y que son los que más solicitan esta prestación ecónomica, así como otras prestaciones y servicios. Es decir, lo que para el Gobierno del PP es la parte más costosa de la Ley de Dependencia.
Desde que gobierna Cospedal se ha reducido en 10.000 dependientes valorados con grado III, pasando de 27.672 en mayo de 2011 a 17.699 en marzo de 2015.
También hay otros datos que corroboran ese grave retroceso de la Ley de Dependencia, aunque en estos dos últimos meses el Gobierno de Castilla-La Mancha con la complicidad del de Rajoy intentan maquillar con trucos estadísticos, como han hecho con el empleo o la lista de espera.
30.000 solicitudes, menos; 19.000, dictámenes, menos; 11.000 prestaciones y ayudas, menos; 3.500 beneficiarios menos atendidos.